Ediciones Pamiés. Phoebe.
Highland Pleasures 1
1881. Los cuatro hermanos Mackenzie son ricos, poderosos, peligrosos, excéntricos y… escoceses. Los escándalos y rumores que les envuelven, las habladurías sobre sus amantes y sus oscuros apetitos, tienen alborotado a todo el país. Cualquier dama sabe que si es vista con uno ellos perderá la reputación de inmediato. El menor, lord Ian, es conocido como el Loco Mackenzie porque ha pasado gran parte de su vida recluido por su tiránico padre en un sanatorio mental. Sin embargo, eso no impide que sea un hombre fuerte y atractivo con una gran inclinación por las tazas de porcelana de la dinastía Ming y las mujeres hermosas. Beth Ackerley es una joven viuda que acaba de heredar una gran fortuna tras una infancia desafortunada y un breve, pero feliz, matrimonio. Ahora, Beth ha decidido que no quiere más sobresaltos; sólo desea vivir en paz, viajar, ayudar a los desfavorecidos y recordar con cariño a su fallecido esposo. Pero entonces, lord Ian Mackenzie irrumpe como un vendaval en su vida y decide que tiene que ser suya…
La locura de lord Ian Mackenzie es una de las historias de amor más bonitas y más bien escritas que he leído en mucho tiempo. Jennifer Ashley pinta un retrato de la sociedad victoriana donde vemos su lado más oscuro, y francamente, me alegro de que esta sociedad haya evolucionado.
Ian, es un héroe inusual ya que tiene el síndrome de Asperger, que es un trastorno relacionado con el autismo. Es incapaz de expresar o sentir el amor, carece de habilidades sociales y no tiene la capacidad de identificarse emocionalmente con la gente. Además ha sido malentendido y maltratado casi toda su vida, y ha tenido que aprender a adaptarse, aunque con ello haya quedado distanciado de todos, incluyendo a su propia familia. Siendo tranquilo, pasivo e introvertido, también es brutalmente honesto. Me encanta su incapacidad para mentir, contener sus pensamientos o entender ciertas expresiones. Y aunque en ocasiones parece fríamente lógico, sigue manteniendo una vulnerabilidad que dan ganas de cuidar de él. Es un personaje maravilloso porque todavía es capaz de ver la belleza que le rodea a pesar de que ha sufrido tanto dolor y confusión a lo largo de su vida. Incluso su tormento se alivia cuando está con Beth, que calma su mente inquieta, y aunque diga que no puede amarla, ella despierta todo tipo de sentimientos nuevos que no puede entender.
Beth es una mujer extraordinaria que ve más allá de su conducta exterior y aun así se siente atraída por él. Aprende a comunicarse a su nivel y al mismo tiempo entiende su manera de ver el mundo. Es nuestra heroína valiente, inteligente, trabajadora, práctica, apasionada, y al igual que Ian, tuvo una infancia difícil. Eso le ha servido para manejarse perfectamente sola sin la ayuda de ningún hombre, pero a veces es demasiado independiente para su propio bien. Ella se siente cómoda en su piel y reconoce que su pasado no la define. Luchará por Ian con todas las armas que tiene a su alcance, y mutuamente se harán sus vidas más fáciles. Además si a eso añadimos que las escenas entre los dos tienen una mezcla de pura sensualidad con ternura, es una historia prácticamente perfecta.
No podemos negar que todos los personajes son complejos y profundos porque la autora ha optado por darles rasgos reales, y por eso conectamos y nos identificamos con ellos en un nivel muy personal. Incluso con los secundarios, ya que podemos echar un vistazo a Mac y su esposa Isabella, que están separados; así como Hart, y Cameron con su hijo, Daniel. Todos estos caracteres tienen un pasado atormentado de una forma u otra, parece como si los Mackenzie no pudieran tener una vida fácil.
Este libro es una montaña rusa de emociones, porque en según qué momentos nos reiremos y en otros nos conmoverá. Jennifer Ashley ha creado dos personajes maravillosos y únicos. Su historia es una historia de amor verdadera, en los buenos y malos momentos y superarán todos los obstáculos que se encuentren en su camino. Sin lugar a dudas es un libro único en un mar de romances históricos que no podéis dejar escapar porque seguramente se convertirá en un clásico.
Ian, es un héroe inusual ya que tiene el síndrome de Asperger, que es un trastorno relacionado con el autismo. Es incapaz de expresar o sentir el amor, carece de habilidades sociales y no tiene la capacidad de identificarse emocionalmente con la gente. Además ha sido malentendido y maltratado casi toda su vida, y ha tenido que aprender a adaptarse, aunque con ello haya quedado distanciado de todos, incluyendo a su propia familia. Siendo tranquilo, pasivo e introvertido, también es brutalmente honesto. Me encanta su incapacidad para mentir, contener sus pensamientos o entender ciertas expresiones. Y aunque en ocasiones parece fríamente lógico, sigue manteniendo una vulnerabilidad que dan ganas de cuidar de él. Es un personaje maravilloso porque todavía es capaz de ver la belleza que le rodea a pesar de que ha sufrido tanto dolor y confusión a lo largo de su vida. Incluso su tormento se alivia cuando está con Beth, que calma su mente inquieta, y aunque diga que no puede amarla, ella despierta todo tipo de sentimientos nuevos que no puede entender.
Beth es una mujer extraordinaria que ve más allá de su conducta exterior y aun así se siente atraída por él. Aprende a comunicarse a su nivel y al mismo tiempo entiende su manera de ver el mundo. Es nuestra heroína valiente, inteligente, trabajadora, práctica, apasionada, y al igual que Ian, tuvo una infancia difícil. Eso le ha servido para manejarse perfectamente sola sin la ayuda de ningún hombre, pero a veces es demasiado independiente para su propio bien. Ella se siente cómoda en su piel y reconoce que su pasado no la define. Luchará por Ian con todas las armas que tiene a su alcance, y mutuamente se harán sus vidas más fáciles. Además si a eso añadimos que las escenas entre los dos tienen una mezcla de pura sensualidad con ternura, es una historia prácticamente perfecta.
No podemos negar que todos los personajes son complejos y profundos porque la autora ha optado por darles rasgos reales, y por eso conectamos y nos identificamos con ellos en un nivel muy personal. Incluso con los secundarios, ya que podemos echar un vistazo a Mac y su esposa Isabella, que están separados; así como Hart, y Cameron con su hijo, Daniel. Todos estos caracteres tienen un pasado atormentado de una forma u otra, parece como si los Mackenzie no pudieran tener una vida fácil.
Este libro es una montaña rusa de emociones, porque en según qué momentos nos reiremos y en otros nos conmoverá. Jennifer Ashley ha creado dos personajes maravillosos y únicos. Su historia es una historia de amor verdadera, en los buenos y malos momentos y superarán todos los obstáculos que se encuentren en su camino. Sin lugar a dudas es un libro único en un mar de romances históricos que no podéis dejar escapar porque seguramente se convertirá en un clásico.
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