26 agosto, 2011

Roca Editorial nos presenta Esperanza la historia de una madre que no se rinde


El deseo más ferviente de Esperanza
Fuente: H.I.J.O.S. (Hijos e Hijas por la Identidad y la Justicia contra el Olvido y el Silencio)
Fecha: 13 de octubre de 2009 La carta de Esperanza Labrador en la web http://www.hijos-capital.org.ar/ Esperanza Labrador, la Madre de la Plaza 25 de mayo cuya familia fue devastada por el terrorismo de Estado, remitió ayer una carta al comisario Alberto Vitantonio, policía que era amigo de Palmiro Labrador, uno de los hijos de Esperanza, asesinado durante la dictadura junto a su padre Víctor Labrador. «Ante la imposibilidad de entregarte esta carta en mano, he decidido hacerla pública a través del diario Rosario/12», comienza Esperanza, que vive en España y está preocupada porque la salud del imputado por crímenes de lesa humanidad se deteriora sin que haya contado qué pasó con su otro hijo, Miguel Angel Labrador.

La súplica de una Madre
«Han pasado muchos años desde las dos últimas veces que nos vimos, cuando me presenté en la ex Jefatura de Policía para pedirte información sobre el paradero de mi hijo Miguel Angel, desaparecido desde septiembre de 1976. Me atreví a hacerlo por la amistad que tú tenías con mi otro hijo, Palmiro, asesinado por el ejército junto a su padre, Víctor Labrador, y su compañera, en octubre de 1976. A pesar de que Palmiro y tú habían sido compañeros y amigos durante todo el colegio industrial, en la primera ocasión aparentaste no reconocerme y negaste tener información sobre mi hijo. Años más tarde volví a presentarme en Jefatura, esta vez acompañada de mi hija Manuela, y seguiste negando saber nada sobre Miguel Angel.»

El pedido de Esperanza es desgarrador: «No quiero morir sin saber qué pasó con mi hijo, a dónde lo llevaron, qué hicieron con él. No cargues sobre tu conciencia, además de los hechos de los que se te acusa, con la culpa de no haber tenido compasión por una madre que aún espera saber la verdad».

ESPERANZA DE JESÚS M. SANTOS LÓPEZ
Roca Editorial. Memorias. Novedad.
ISBN: 978-84-9918-344-2
Datos: 12 de Septiembre; 352 p.; 18 €.

Esta es la historia de Esperanza Pérez, española nacida en Camagüey (Cuba), recriada en San Esteban de la Sierra (Salamanca) e instalada en Rosario (Argentina). Su madre murió al poco de nacer ella, y su padre, al darse cuenta de que no podía cuidarla, se la dejó «en depósito» a una familia que la aceptó como una hija más hasta que, años después, el padre que nunca había dado señales de vida volvió para recuperarla.
Esta es la historia de un desgarro. De una vida nueva: la que la pequeña Esperanza empezó en España, tierra áspera, tan diferente a su Cuba natal. De un doloroso proceso de adaptación. También es una historia de amor, porque Esperanza conoció a Víctor, con quien en 1950 y ya madre de tres hijos (y un cuarto por llegar), emigró a Argentina, para volver a empezar.
Esta es la historia de un tiempo aciago. Septiembre de 1976. El pequeño de la familia, Miguel Ángel Labrador Pérez, desaparece; Víctor Labrador, Palmiro Labrador Pérez y la compañera de este último, Edith Graciela, son asesinados. Poco después, el general Leopoldo Fortunato Galtieri se excusará, pero sólo por la muerte del padre. «Fue un lamentable error».
Esta es la historia de una lucha, la que Esperanza mantiene para recuperar a su hijo. Una historia terrible y, por terrible que resulte decirlo, una historia habitual en Argentina, y en otros países donde la sinrazón terrorista se confundió con la razón de Estado.
Esta podría ser una historia inventada, pura ficción. Pero Esperanza existe, vive, y su batalla no ha terminado.

Jesús M. Santos es natural de Plasencia (Cáceres), estudió Filosofía y Periodismo, y ha desarrollado su actividad profesional en numerosos medios de comunicación. Ha sido director de Asuntos de Presidencia de la Corporación RTVE. Ha sido Subdirector de Informativos de Telecinco y director de Contenidos Multimedia. Ha ocupado, en Antena 3 Televisión, la Dirección del Canal Internacional, la subdirección de Informativos y la Dirección de Informativos de fin de semana.

Hace 33 años conoció a Esperanza…
"Alguien le dio mi nombre y una tarde se presentó con Manoli, su hija, en mi casa para contarme su historia y pedirme que la ayudara a redactar un informe que resumiera su tragedia y expresara su único deseo: encontrar a su hijo pequeño. Fue una conversación tramada con sigilo, con la clandestinidad a que obligaba el miedo a la larga sombra de los militares argentinos y la situación política en España, todavía insegura o, siquiera, incierta. Se sentaron frente a mi mesa. Primero hablaron; luego, también lloraron y hubo un instante en el que Esperanza gritó. Me emocionaron y me estremecieron. Desde entonces las he querido."

«Estoy seguro de que este libro es el trabajo de un periodista. Puede ser una crónica, una biografía, pero también puedo aceptar que no se ajusta al modelo testimonial. Para mí lo que este libro tiene de ejercicio literario pretende que la narración ayude a sentir la historia de Esperanza. Porque Esperanza es, sobre todo, una emoción.» El autor.

Más información:
La historia de Esperanza, en El País (1996)
http://www.elpais.com/articulo/espana/STRASSERA/_JULIO_CESAR/ESPANA/ARGENTINA/ARGENTINA/DESAPARECIDOS_Y_DICTADURA_MILITAR_/1976-1982/asusten/venimos/matar/hijo/Palmiro/elpepiesp/19960923elpepinac_21/Tes

Miguel Ángel Labrador, en el Muro de la Memoria (Desaparecidos.org)
http://www.desaparecidos.org/arg/victimas/l/labradorm/

Reportaje en El País: «Desaparecidos» (2007)
http://www.elpais.com/articulo/reportajes/Desaparecidos/elpepusocdmg/20070930elpdmgrep_1/Tes

Página de Facebook de “Arderá la Memoria. La historia de las Madres de Plaza 25 de mayo de Rosario”.

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